"A consecuencia de la pandemia, pero también de otra serie de traumas colectivos que estamos viviendo (aquí está todo el conjunto de desigualdades económicas, la emergencia climática, la polarización en nuestro entorno, política…) estamos viviendo una situación, un conjunto de traumas colectivos permanentes, acumulativos, que tienen un impacto sin duda sobre la salud física y también sobre la salud mental. Creo que hay un reconocimiento por parte de los ciudadanos de esta situación y esto explica que la salud mental esté en la agenda de los ciudadanos. Creo que los medios de comunicación y los políticos han captado esta situación y está en la agenda política. Ahora tendríamos que traducir todo esto en la mejor gestión posible. Pienso que a nivel de la Comunidad Valenciana el hecho que se constituya y se nombre por primera vez un comisionado de presidencia de la salud mental para elaborar un plan de acción en salud mental y que se hayan puesto en marcha un conjunto de cosas, indica que se está empujando en la dirección adecuada, desde mi punto de vista. En otros ámbitos creo que es insuficiente. En otros ámbitos como pueden ser a nivel nacional, aunque es verdad que por fin se ha aprobado la estrategia de salud mental, esta estrategia no va acompañada por ahora de un presupuesto para poner en marcha de manera inmediata determinados aspectos fundamentales en la situación que estamos viviendo. Por ejemplo, dentro del plan de recuperación estatal es relacionado con el componente 18 que tiene que ver con la modernización del sistema sanitario, ese componente 18 de fondos europeos de recuperación, 1.069 millones, tan solo 2,5 millones (0,24%) tienen que ver con salud mental. Es claramente insuficiente. En este sentido pensamos que hay que hacer un esfuerzo mayor en todos los ámbitos", argumentó Tabarés sobre la situación de la salud mental en España y la Comunidad Valenciana. 

 

El Comisionado aseveró que todo el mundo es susceptible de tener una depresión y avisa del aumento en el consumo de psicofármacos: "Creo que tenemos que mirarnos nosotros mismos y decirnos como lo hemos pasado y como lo estamos pasando. Las cifras de trastorno depresivo a nivel global se han puesto en tasas de prevalencia entorno al 30% de la población a nivel global. Los trastornos de ansiedad también entorno al 27 o 28%. Son dos datos que plantean como en este tiempo los cuadros depresivos, los cuadros de ansiedad, las personas que ya venían de atrás con una situación de vulnerabilidad (no solo mental sino también física). Personas que tenían problemas orgánicos, crónicos… y que, a consecuencia de la paralización de sus tratamientos, del acceso adecuado a las consultas han empeorado. Se han visto en situaciones de incertidumbre, de preocupación muy importantes. Es decir, hay datos que indican claramente como se ha producido un aumento de los problemas de salud mental en sobre todo grupos más vulnerables. Esto ha obligado al hecho que en muchas ocasiones se eche de un remedio relativamente fácil que es la medicalización. Los psicofármacos (ansiolíticos y antidepresivos) han aumentado el consumo de ellos. Muchas veces de una forma autodidacta, para decirlo de alguna manera. Autoconsumo y sin control médico".

 

"El sistema sanitario se ha sometido a una maceta mantenido de estrés extraordinario… y que no ha acabado y probablemente no acabo próximamente. La situación de muchos profesionales, en general, del sistema sanitario, es de degast importante. El número de bajas profesionales que se están cometiendo es relativamente importante, lo cual hace más difícil que sean capaces de dar una respuesta inmediata. Si a esto añadimos que las medidas que estamos poniendo en marcha requieren la contratación de personal especializado (pondremos en marcha la contratación de 69 profesionales). Pero por ejemplo será complicado conseguir los 13 psiquiatras que queremos contratar", señaló sobre la situación de los profesionales sanitarios.

 

En cuanto al plan de choque valenciano, Tabarés dijo que: "pondremos en marcha un plan que sea realmente atractivo porque los profesionales que estén, quizás, en situaciones precarias en otros lugares, sea atractivo que vengan aquí. Tenemos a muchos profesionales que se han formado en la Comunidad Valenciana y que están trabajando en otros lugares. Es cierto el sistema sanitario de formación de especialistas es un sistema que obedecía a unas necesidades demográficas que no tenía en cuenta estas circunstancias que han aparecido. Es una llamada de atención para tener en cuenta que probablemente es necesario formar más y mejor a posibles licenciados o grados de medicina y además especialistas de determinadas áreas que en los próximos años se puedan disparar en cuanto a necesidades. En este sentido nosotros estamos trabajando, focalizando nuestro esfuerzo en la situación de niños, niñas, jóvenes y adolescentes. Estamos desarrollando un plan porque en los próximos años se cubran las necesidades que hasta ahora desgraciadamente veníamos de una situación claramente insuficiente. Con este plan de choque y este plan estructural queremos invertir en los próximos años 70 millones. Con este ejercicio de 2021 y del 2022 para contratar también ya a 69 más 50 profesionales relacionados con la salud mental y poder poner en marcha equipos de intervención voluntaria, hospitales de día que no disponíamos de ellos en todo el territorio".

 

"Allá donde no llega el público o no llega bastante rápido se intenta colaborar con el privado. Desde mi perspectiva pienso que todo el que tiene que ver con la estrategia, organización, planificación… tiene que surgir del público. Pero en todo caso se puede concertar determinados aspectos allá donde no llegamos porque sea rápido", añadió sobre el tema.

 

Al mismo tiempo, apuntó que uno de los problemas más graves tiene que ver con el poder económico y la clase social: "No solo hay una brecha desde el punto de vista económico en relación con la accesibilidad a profesionales, sino que además hay un determinante relacionado con la clase social en la hora de tener más problemas mentales o menos. En los primeros meses de pandemia se disparó la sintomatología de ansiedad a consecuencia de la incertidumbre, de la posibilidad de perder el trabajo. Cuando se pusieron en marcha las medidas gubernamentales para asegurar la prestación económica, bajaron las tasas de incertidumbre. Los datos que tenemos es que la clase social determina los problemas mentales".

 

"La concienciación ciudadana relacionada con la salud mental ha sido muy volátil. Está muy centrada en el que son los enfermos mentales graves (esquizofrenia, trastorno bipolar grave, depresión grave, autismo…). La sociedad ante esta gente adopta una actitud compasiva, muchas veces de estigmatización, llena de prejuicios. Los medios de comunicación y profesionales tenemos un trabajo de dar buena información y esto es un trabajo a medio y largo plazo. La pandemia el que ha hecho es retirar el velo y permitir tomar conciencia que cualquiera de nosotros podemos llegar a una situación de problemas depresivos, ansiedad, con problemas relacionados con el alcohol o con adicciones. Tomar conciencia de esto ha sido muy importante. Y esto no acabará aquí. Pero este planteamiento puede cambiar con los meses. Es fácil que el que más o el que menos si vayamos recuperándonos ponga en marcha mecanismos de negación y de resiliencia y diga, ya lo he pasado. Es fundamental ponernos a trabajar con aspectos como si tenemos los recursos sanitarios suficientes. En estos momentos no los tenemos, pero se están haciendo esfuerzos importantes. Durante el tiempo de pandemia se han contratado 137 profesionales, pero se harán estructurales dentro del presupuesto de 2022. A esto hay que añadir los 69 profesionales. En salud mental es fundamental trabajar en equipo. El objetivo hasta 2027 será la contratación de 270 profesionales, pero no creo que con todo esto podamos hacernos cargo de toda la ola pandémica de salud mental", declaró Tabarés sobre cómo ve el futuro en el ámbito de la salud mental en la Comunidad Valenciana.

 

Por otro lado, comentó que los jóvenes son el sector de la población que más lo está acusando: "En el curso pasado durante cuatro meses los jóvenes sufrieron un experimento que nunca antes se había puesto en marcha. Quedarse sin colegio y quedarse a casa sin contacto presencial con la gente habitual. Esto tiene relación con el incremento de adicciones con Internet, apuestas, pantallas… probablemente sí. Desde el punto de vista de desarrollo cerebral, los problemas sociales, sus miedos en cuanto a imagen… tenemos algunos datos que no son nada buenas. Si comparamos los datos en cuanto a suicidios en menores de 39 años del 2019 al 2020 vemos que se ha incrementado un 20%. En las personas de más de 70 años ha disminuido un 21%. Por lo tanto, estamos muy preocupados con los niños, niñas, jóvenes y adolescentes. La primera causa de años perdidos de vida en los jóvenes de Europa es el suicidio. Por eso queremos intervenir. Estamos trabajando en la convención ciudadana en salud mental".

Así pues, sobre la pandemia remarcó que "pienso que un porcentaje importante de la población ya vive en una situación de normalización con el virus. Pone en marcha mecanismos de negación, de resiliencia… y estas personas es difícil que caigan en un cuadro de ansiedad o depresión. Pero hay personas más vulnerables, los que han perdido a seres queridos, estudiantes que no han podido salir a estudiar… en general personas vulnerables que se los ha roto su marcha. Y hay un grupo de personas que no ven soluciones a sus problemas económicos o de salud que están cayendo al precipicio. Esta situación para los más beneficiados puede revertir, puede cambiar si esto perdura, se mantiene y se van solapando traumas colectivos".

 

Para finalizar, Rafael Tabarés puntualizó que "no hay una receta general para problemas tan complejos, porque las ideas de suicidio están muchas veces relacionadas con los cuadros depresivos y tienen un funcionamiento diferente a otro tipo de trastornos, pero desde mi punto de vista hay un aspecto clave y es que hay que evitar el silencio. Tenemos que tener la valentía y darle a esta persona que está en esa situación el significado y el valor que merece sin tener miedo, sin decir grandes palabras o hacer consejos que son absolutamente fuera de lugar como el aquí no pasa nada, saldrás adelante, tú el que tienes que hacer es no pensar en estas cosas… Esto no tiene ningún sentido. No para dejar de hablar de esto no se producirán estas conductas".